martes, abril 30

La agresión rusa y el referéndum ilegal sobre la anexión de parte del territorio de Ucrania

Consejo de Seguridad
Foto: Archivo

La comunidad internacional ha condenado ampliamente la agresión rusa contra Ucrania iniciada en febrero de este año y el referéndum organizado ilegalmente por Moscú en los últimos días para anexar parte del territorio de Ucrania, las regiones de Donetsk, Luhamsk, Kherson y Zaporizhia, todo absolutamente contrario al derecho internacional y al orden establecido en el que se prohíbe el uso de la fuerza y ​​la anexión por este medio y la injerencia en los asuntos internos de otros países.

La comunidad internacional favorece, también en general, con la excepción de los gobiernos aliados de Moscú que se suman al desorden internacional, la defensa por parte de Ucrania de su territorio, su integridad territorial, su independencia y su soberanía, simplemente una respuesta enmarcada en el marco del derecho reconocido por las Naciones Unidas, de legítima defensa, previsto por la Carta de la Organización y que constituye una excepción al uso de la fuerza, prohibido por la misma Carta y por el derecho internacional consuetudinario.

Las tensiones internacionales aumentan a medida que Rusia amenaza con una «respuesta» contundente que incluye el uso de armas nucleares. La anexión ilegal de territorios ucranianos por parte de Rusia simplemente busca encontrar la “base legal” para justificar por todos los medios la defensa y tratar de mostrarla ajustada al derecho internacional. Es decir, convertir la agresión y ocupación de un territorio extranjero en legítima defensa del territorio nacional.

La agresión rusa a veces parece imparable por los medios pacíficos establecidos en la Carta de las Naciones Unidas. El sistema es débil ante la arrogancia de uno de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad que se supone goza de este privilegio para contribuir al mantenimiento y restauración de la paz y la seguridad internacionales. La declaración de un acto de agresión depende de una decisión del Consejo de Seguridad donde se encuentra el agresor, lo que también limita la posibilidad de que los órganos de justicia internacional ejerzan su jurisdicción si tuvieran jurisdicción sobre este crimen.

No hay duda de que, tal como lo exigen algunos países europeos, incluida Italia, en coordinación con la Unión Europea, Rusia debe retirarse de inmediato y sin condiciones del territorio ucraniano.

La crisis planteada por Rusia, que pone en peligro la paz y la seguridad internacionales y la existencia misma de la humanidad por las amenazas desmesuradas e irresponsables de Putin, vuelve a reclamar reformas y revisión de conceptos. La ONU parece haberse agotado ante la realidad de una potencia agresiva como Rusia, que demanda con urgencia estudiar las reformas necesarias para adecuar el sistema a las nuevas realidades y exigencias de la sociedad internacional y de los pueblos del mundo para ejercer plenamente el derecho a la paz y la seguridad.

El periodismo independiente necesita el apoyo de sus lectores para seguir adelante y asegurarse de que las noticias incómodas que no quieren que lea permanezcan a su alcance. ¡Hoy, con su apoyo, seguiremos trabajando duro por un periodismo libre de censura!
Hildelita Carrera Cedillo
Hildelita Carrera Cedillo