(CNN Español) — El Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba) ya presenta «Diego y yo», el autorretrato de Frida Kahlo que se ha convertido a finales del año pasado en la obra más cara de una artista latinoamericana vendida en subasta.
El empresario argentino Eduardo Costantini adquirió la obra en una subasta de Sotheby’s en Nueva York. Costantini participó en línea, con un ojo en la pantalla de la computadora que lo vinculó al evento y una oreja pegada al teléfono en caso de que se interrumpiera la comunicación por internet, dijo también el fundador del Malba a CNN en una entrevista.
La oferta de $ 34,9 millones no solo hizo la compra, sino también un máximo histórico. Antes de esta adquisición, la pintura número uno era una pintura de Diego Rivera, el esposo de Kahlo, que se vendió por $9.8 millones en 2019.
Con tres lágrimas rodando por su rostro y el rostro de Diego Rivera con un tercer ojo dibujado en la frente, «Diego y yo» es interpretado por la crítica especializada como una manifestación de los tormentosos sentimientos de Kahlo en torno al tumultuoso vínculo con Rivera. . Es un óleo de 12 pulgadas por 9 pulgadas sobre Masonite y es el último autorretrato de Kahlo, completado en 1949, cinco años antes de su muerte en 1954.
“Este trabajo es un testimonio del amor que siente por Diego. Lo representa en un momento muy dramático”, dijo Costantini a CNN. “Expresa la angustia, con el pelo enredándose en el cuello como una situación asfixiante, las lágrimas y Diego en sus pensamientos de tres ojos”.
Frida Kahlo y Diego Rivera se conocieron cuando ella le pidió que criticara su trabajo. Así comenzó a escribirse la historia de una de las parejas más representativas del arte latinoamericano. Se casaron dos veces: se divorciaron en 1939 y se volvieron a casar al año siguiente. Ambos tuvieron aventuras extramatrimoniales y la obra de Kahlo ha estado marcada, entre otras tragedias personales, por los altibajos de su relación con el muralista mexicano, 21 años mayor que ella.
“Frida es una artista brillante, no sólo por la habilidad técnica del retrato, sino también porque ha hecho de la imagen su autobiografía”, explica Costantini. “La atraviesan dos dramas: uno es claramente el accidente que tuvo a los 18 años, que la encerró en cama durante meses y meses, y el otro es el gran amor, doloroso y a la vez insoportable, con Diego”.
La pintura de Kahlo ha permanecido fuera del circuito de exhibición internacional durante los últimos 25 años. Fue presentado públicamente en 1998 y luego permaneció en manos de una colección privada hasta el día de hoy, según el sitio en línea del Malba.
Desde este jueves, «Diego y yo» se puede descubrir en La Malba de Buenos Aires en una exposición titulada El tercer ojo, que reúne las obras maestras del museo así como obras de la colección privada de Costantini. Entre las más de 240 piezas que formarán parte de la propuesta, se encuentran obras de artistas como Diego Rivera, Tarsila do Amaral, Xul Solar, Joaquín Torres García, Emilio Pettoruti, Wifredo Lam, Roberto Matta, Maria Martins y Remedios Varo, entre otros. .